TECNICAS DE ESTUDIO II

El estudio serio requiere silencio, tranquilidad, orden, planificación, organización...  concentrarse y estar sólo pendiente de las actividades escolares, por lo tanto, si es posible, debeis estar aislados de posibles molestias, charlas de adultos, televisión, música, ruidos, etc . 

 

No se trata de dedicar mucho tiempo al estudio, sino de dedicar el necesario y aprovecharlo al máximo. Seguro que conocéis a personas que dedican mucho tiempo a un trabajo pero no rinden casi nada, porque pierden el tiempo miserablemente (en el tajo, en la oficina, parecen que hacen, pero no hacen) Con el estudio, ocurre algo parecido, el hecho de que el alumn@ se encierre toda la tarde en su cuarto, no garantiza que el rendimiento sea el adecuado. 

 

Se pueden hacer tantas cosas en una habitación de estudio, que nada tienen que ver con las tareas escolares: ver la televisión, escuchar música, recortar y dibujar papelitos, mirar por el cristal de la ventana, conectarse a internet, wapsaps,  jugar con la” pley”, o simplemente pensar en el chic@ de tus sueños.

 

Es posible que después de varias horas duras de “trabajo” salgáis incluso fatigados, aunque no hayais abierto ni un solo libro. A veces nos encontramos con madres y padres preocupados que visitan al tutor de su hij@ y se presentan preocupados, extrañados , sorprendidos, y les dicen: “pero si el/la pobre no sale, si se mete en su cuarto después de comer y está hasta las 10 de la noche, si no pisa la criatura la calle” ¿Cómo puede haber sacado 4 suspensos?

 

El tiempo de estudio debe ser eso, tiempo de estudio, momentos para hacer ejercicios, leer, repasar, memorizar, consultar, anotar dudas, etc, etc, y  estudiar solo el tiempo necesario, pero nada más que a estudiar, evitando distracciones y procurando la máxima concentración. Es posible que engañeis a los padres, madres, a los profes, pero no debéis engañaros vosotros mismos, ya que  más tarde o más temprano los resultados serán fiel reflejo de vuestro esfuerzo y trabajo. Es preferible dedicar una hora de estudio real, que toda una tarde de estudio simulado o disimulado, perdiendo el tiempo conscientemente o inconscientemente.